Este sábado en Jaén tenemos una cita especial: la carrera de San Antón.
Son ya 37 años los que lleva celebrándose esta carrera en la que participan más de 10.000 corredores cada año, considerada desde 2012 como Fiesta de Interés Turístico Nacional. Además, es la segunda nocturna más importante, después de la San Silvestre de Madrid.
La festividad de San Antón en Jaén es una tradición que lleva celebrándose desde el siglo XIII. Durante la noche del 16 al 17 de enero la ciudad salía a la calle y los vecinos se reunían alrededor de una hoguera cantando coplillas típicas, comiendo rosetas, calabaza asada…
Sin embargo, en 1984 las hogueras empezaron a disminuir y solo se celebraban en dos barrios, perdiéndose la tradición tan especial de compartir una noche de convivencia con los vecinos. Pero como dice el refrán:“no hay mal que por bien no venga”; así que para evitar que esta celebración desapareciera surgió la idea de organizar una carrera popular que uniera los dos barrios en los que seguían encendiéndose las hogueras, pasando por el casco antiguo de la ciudad. Y la sorpresa fue que ese año se consiguió la participación de 180 corredores.
El éxito fue tal que cada año acudían más corredores profesionales y muchos vecinos de Jaén se animaban también a correrla y disfrutar de esa mágica noche por su ciudad.
Porque sí, te aseguro que es una noche mágica y especial.
La ciudad enciende sus luces de Navidad cumpliendo con la tradición: “Hasta San Antón, Pascuas son”. Además, el recorrido está iluminado por antorchas que portan los vecinos, especialmente durante el tramo final, que después quemarán en las hogueras repartidas por los diferentes barrios.
Imagen extraída de: ideal.es (Realizada por Francis J. Cano)
Si te animas a visitar Jaén durante la noche de San Antón no te arrepentirás y será inolvidable. Llorarás a la vez que reirás, porque en la San Antón, todo está permitido:
Su gran afluencia (más de 10.000 corredores) ha hecho que pase de celebrarse la noche de San Antón (del 16 al 17 de enero) al sábado más cercano a este, para facilitar que puedan acudir más corredores y también más público a disfrutar de esta noche.
Hoy tenemos la gran suerte de contar con una colaboradora especial, Andrea Higuera, dietista-nutricionista deportiva que durante los últimos 2 años ha estado al frente de la nutrición deportiva del CAR (Centro de Alto Rendimiento) de Madrid, ayudando a cientos de deportistas de alto rendimiento a mejorar sus marcas a través de la alimentación.
Andrea nos contará todos los consejos y recomendaciones para planificar una adecuada alimentación previa a la carrera.
Las carreras de 10.000 metros o 10 Km. son las más demandadas en la actualidad por numerosos aficionados, que tienen como meta la satisfacción de mejorar su tiempo y disfrutar. La duración depende de la experiencia y habilidad de cada uno, oscilando desde menos de 30 minutos en los más veloces, hasta más de hora y media.
Se debe tener en cuenta que para realizar esta prueba se necesita un entrenamiento físico adecuado y una buena alimentación. La dieta juega un papel crucial en el rendimiento deportivo, tanto es así que lo llamamos el ‘entrenamiento invisible’.
La dieta previa al entrenamiento o competición en este tipo de carreras tiene como objetivo retrasar al máximo la aparición de fatiga.
Una comida rica en hidratos de carbono tomada los días anteriores a la prueba ayuda a completar las reservas de glucógeno del organismo (hepático y muscular).
También es necesaria la ingesta de proteínas de fácil digestión y alto valor biológico, ya que son utilizadas como sustrato para la síntesis y regeneración de las fibras musculares, y su consumo permite una rápida disponibilidad de aminoácidos en sangre, evita una elevada destrucción proteica, y colabora en el mantenimiento de la masa muscular, minimizándose así el daño producido por el ejercicio.
Como recomendación extra, no se aconseja la toma de bebidas energéticas, ya que contienen una alta cantidad de azúcares. Si queremos un extra de energía antes de la carrera, nuestra alimentación y entreno anterior (bien realizado) será suficiente, y, de forma opcional, se puede tomar un café entre 1 hora y hora y media antes de desempeñar la prueba.
En carreras de 10K no suele ser necesario la ingesta de nutrientes durante el evento, puesto que la duración es relativamente corta.
Es por eso que en este caso no será necesario ingerir alimentos, aunque sí es imprescindible la hidratación según las necesidades de cada uno.
Infórmate de si hay avituallamientos durante la carrera, que puedan ayudarte y ya hayas probado antes.
Objetivo: mejorar, optimizar y acelerar la recuperación física.
Hay que tener en cuenta tanto una correcta rehidratación, como la recarga de las reservas de glucógeno del organismo, reparación del daño muscular producido por el ejercicio, estimulación de la síntesis proteica y normalización de la actividad del sistema inmune.
Lo ideal es no dejar pasar más de horas desde que terminamos la prueba hasta que cenamos, así aprovecharemos la ‘ventana metabólica’ que es el tiempo, tras el ejercicio, en el que el organismo es más receptivo al aporte de nutrientes y su restablecimiento en el organismo es más rápido.
En el menú post ejercicio no deben faltar alimentos ricos en hidratos de carbono y proteínas, fundamentales para la óptima recuperación del deportista. No debemos olvidar la presencia de verduras y frutas, como fuente de vitaminas, minerales, antioxidantes y compuestos bioactivos, que ayudan a la recuperación de nuestro organismo.
Por lo tanto, a pesar de que una prueba de 10 kilómetros no presenta un elevado nivel de exigencia, es importante llevar una alimentación adecuada los días previos con el fin de mejorar el rendimiento y evitar el riesgo de lesiones.
María Dolores Funes y Andrea Higuera